Mi querido bebé, ha pasado más de un mes desde que te fuiste de forma inesperada.
Nunca imaginé que te irÃas tan pronto y que perderte dolerÃa tanto.
Tu hermana y yo te echamos muchÃsimo de menos.
Ella echa de menos tu compañÃa, vuestras muestras de cariño, dormir juntos… incluso dirÃa que pelearse contigo.
Añoro despertarme por las mañanas y no sentirte cerca de mi, echo de menos cuando me maullabas si no me despertaba a mi hora, cuando me mirabas desde la cama mientras bailaba frente al espejo, que ocupes toda mi cama, cómo nos esperabas en la puerta de casa cuando llegábamos de dar un paseo tu hermana y yo o cuando me pedÃas la comida 3 horas antes de tu hora de comer. Mientras me duchaba te quedabas quieto esperando a que saliera de la ducha.
Y cómo me cuidabas cuando no estaba bien… si escuchabas mi llanto, no dejabas que nadie se acercara a mÃ. Añoro tus besitos, tu lengua aspera, el calor que emanabas…
Echo de menos como competÃas con tu hermana por los cariñitos, ya fueran mÃos o de las visitas que tenÃamos en casa, cuando me acompañabas en el desayuno o te sentabas conmigo cuando me tomaba un café sólo para poder comerte un trocito de mi bizcocho, cuando maullabas acusando a tu hermana de algo que habÃa hecho o hacÃais alguna trastada juntos.
Aunque me enfadaba contigo cuando te quedabas dormido sobre mi ropa, ahora me encantarÃa que volvieras a hacerlo.
Siempre recordaré el dÃa que conociste la naturaleza y a tus amigos los caballos. Fue un dÃa épico.
A pesar de echarte de menos, agradezco tanto todo lo que hiciste por mi…
Estuviste en los momentos buenos y no tan buenos. Me apoyaste de forma constante.
Agradezco que hayas compartido tu vida con nosotras durante estos 13 años y me habrÃa gustado darte más. Sólo espero que hayas disfrutado de tu vida a nuestro lado.
Fuiste cariñoso y fuerte hasta el último momento. No fue fácil dejarte ir, pero sé que fue lo mejor para ti, porque no te merecÃas sufrir.
A pesar de que te echamos de menos, durante todo este tiempo, hemos seguido adelante, enfocándonos en que no te habrÃa gustado vernos tristes.
Aunque a veces, suelte una lagrima, tu recuerdo merece más una sonrisa.
Gracias por elegirnos y querernos tanto.
Hace unos dÃas, vi a un gatito que era idéntico a ti y sentà como si me dijeras que todo está bien. Que siempre vas a estar ahÃ.
Simba, mi hijo gatuno, siempre estarás conmigo.